¿Cuánto vale la privacidad? La historia de un hombre que la consiguió sin perder conexión a internet


Diez pasos para desaparecer del sistema usando bitcoin
Jamson Lopp es un libertario, cyberpunk y bitcoiner estadounidense que decidió desaparecer de todos los registros y restringir su contacto con entes gubernamentales en pos de aumentar al máximo su privacidad. Todo eso sin perder su conexión a internet.
Tomó la extrema decisión luego de recibir de manera imprevista al equipo de SWAT en su casa por una llamada que realizó un extraño diciendo -falsamente- que la persona de esa casa había disparado a alguien y tenía a otra secuestrada. Justo después de ese sorpresivo episodio, Lopp recibió un llamado instándolo a pagar un precio en bitcoins para no recibir más ese tipo de amenazas.
Con el objeto de que nadie supiera más nada sobre él, su vida, sus compras, y sus direcciones el bitcoiner, que tiene 192 mil seguidores en su cuenta de Twitter, comenzó un proceso de 15 pasos para borrar su nombre del sistema. Lopp se tomó esto como una especie de experimento, para averiguar hasta qué punto tendría que esforzarse para salir de las bases de datos que contienen información personal y ponerla a disposición de cualquier persona que esté dispuesta a pagar por ello.
Cómo lo hizo
1.Creó una nueva identidad corporativa
Lopp conversó con el New York Times sobre cómo hizo para convertirse en un fantasma. En primer lugar, su objetivo fue evitar que su nombre termine en bases de datos al momento de comprar una propiedad o sacar una nueva tarjeta de crédito. El buscaba mantener cierta normalidad en su día a día.
Para poder lograr eso, Lopp necesitaba comenzar a pagar sus servicios y compras sin que ello resultara en revelar su identidad e información personal. Sus abogados le recomendaron crear una compañía de responsabilidad limitada (SRL o LLC en inglés).
Encontró que tres Estados de Estados Unidos (Nevada, Wyoming y Nuevo México) no requerían que registre su nombre real para crear este tipo de empresas. Fundó más de una, por si aparecía algún problema con las otra.
2. Confirguró nuevas cuentas bancarias y tarjetas
Nada más personal que las transacciones que realizamos a diario. Todas ellas quedan registradas. Aprovechó la creación de estas empresas y abrió una cuenta bancaria corporativa junto con nuevas tarjetas de crédito que no le pedían que indicara su nombre en el plástico.
Aseguró que realiza la mayoría de las compras, especialmente aquellas online, a través de tarjetas prepagas que no tienen asociados su nombre ni la de su empresa.
3.Usa efectivo
El efectivo es el rey para aquellas personas que valoran su privacidad, como el señor Loop. Si bien no precisó cuanto efectivo lleva en su billetera, Loop paga al contado sus compras de todos los días.
4. Obtuvo un nuevo número de teléfono
Se sabe que las compañías telefónicas tienen registro de nuestro nombre y dirección. Por eso, dejó de utilizar su celular y compró otro a nombre de la empresa. También comenzó a usar un servicio que genera nuevos números de teléfono desechables que ocultaban su cuenta madre.
5. Dejó de usar el celular para obtener instrucciones
Decidió apagar todas las aplicaciones que tuvieran geolocalización. Para manejar, usa un dispositivo GPS que no está vinculado a él.
6. Se mudó
La antigua casa de Lopp estaba 100 por ciento atada a él, por lo que él y su perro necesitaban un nuevo hogar en esta flamante etapa de su vida. Para ello uso su LLC y un cheque para pagar la totalidad de su nueva casa.
7. Se cambió el nombre
Para las interacciones con vecinos y otras personas cercanas, Lopp comenzó a utilizar un alias. Sostuvo que al comienzo le era raro decir otro nombre, pero luego le pareció más extraño aún revelar su verdadera identidad.
8. Utiliza un VPN para navegar internet desde su casa
Era consciente que era posible vincular las direcciones de internet a clientes específicos, por lo tanto, para proteger su dirección hizo que su tráfico en la red pareciera que viene de diferentes lugares.
9. Compró un auto común y corriente
Lopp solía tener una moto y un Lotus Elise, un tipo de auto algo extravagante. Por eso, cuando decidió comprar uno nuevo, optó por un modelo menos llamativo y utilizó, de vuelta, la empresa para firmar los papeles. También desechó la patente que tenía que decía BITCOIN.
10. Adquirió otra propiedad para engañar a un ente del Gobierno
Para registrar su coche, el organismo D.M.V. insistió en Lopp diera un nombre real, por eso para satisfacer al ente decidió comprar una nueva casa y puso esa nueva dirección para que no tuviera que revelar la dirección donde realmente vivía.
11. Configuró un buzón privado
Ya que Lopp no tenía deseos de que su dirección nueva estuviera en la lista de correos de nadie, abrió una cuenta en una empresa privada que permite recibir envíos no lejos de su dirección actual.
12. Dominó el arte del disfraz
Como actualmente existen cámaras de seguridad en todas partes, y muchas de ellas funcionan con software de reconocimiento facial, Lopp anda por la calle con anteojos de sol y un sombrero. También se dejó la barba.
13. Trabaja remotamente
Como asistir a una reunión en persona daría a sus clientes información sobre sus viajes y ubicación, esta persona tomó la decisión de trabajar remotamente y si hace reuniones las organiza vía video llamadas.
14. Encripta su información cada vez que viaja
Para salir del país necesita presentar obligatoriamente su pasaporte, pero para evitar que los agentes de la aduana revisen su información privada, encripta todo antes de viajar y apaga todos sus dispositivos.
15. Contrató a detectives privados para que traten de encontrarlo
Para saber si estaba haciendo un buen trabajo, Lopp contrató a detectives para que intenten localizarlo.
Finalmente, el bitcoiner precisó que realizar todos estos pasos para defender su privacidad le costó unos 30 mil dólares.